El exmandatario de Panamá, Ricardo Martinelli, ha recibido asilo en Colombia, luego de pasar más de un año resguardado en la embajada de Nicaragua en la Ciudad de Panamá. Esta medida se toma después de que Martinelli fuera sentenciado en julio de 2023 a diez años y ocho meses de cárcel, y se le impusiera una sanción de 19,2 millones de dólares por lavado de dinero en el caso denominado «New Business», vinculado a la compra de un grupo de medios sufragado con recursos del estado.
A partir de febrero de 2024, Martinelli se hallaba en la embajada de Nicaragua, afirmando que era objeto de hostigamiento político y que temía por su integridad física. En un principio, el gobierno de Panamá le brindó un salvoconducto para viajar a Nicaragua, pero este dejó de ser válido sin que se realizara su partida.
El reciente otorgamiento de refugio por parte de Colombia fue notificado formalmente a las entidades panameñas. En consecuencia, Panamá emitió un nuevo permiso de tránsito para garantizar la salida segura de Martinelli hacia Bogotá, cumpliendo con las responsabilidades establecidas en las Convenciones sobre Asilo de 1928 y 1933.
Colombia fundamentó su elección en su histórica vocación de ayuda humanitaria y su dedicación a resguardar a individuos perseguidos por razones políticas. La administración colombiana subrayó su consideración hacia el derecho internacional y las entidades vinculadas con el asilo dentro del sistema interamericano.
A lo largo de su tiempo en la embajada de Nicaragua, Martinelli siguió involucrado en la política de Panamá, apoyando la postulación de José Raúl Mulino, quien terminó ocupando la presidencia después de que Martinelli fuera inhabilitado por su sentencia. Este hecho causó polémica, ya que las reglas internacionales de asilo prohíben de manera clara que los asilados se involucren activamente en la política.
Asimismo, más allá del caso «New Business», Martinelli está siendo investigado en otras causas de corrupción, entre ellas su supuesta participación en el escándalo de sobornos de la empresa constructora Odebrecht. En el año 2023, Estados Unidos le impuso sanciones, tildándolo de exlíder corrupto.
La salida de Martinelli hacia Colombia marca un nuevo capítulo en su trayectoria política y judicial. Aunque ahora se encuentra bajo la protección del asilo colombiano, las investigaciones en su contra continúan, y su situación legal sigue siendo objeto de atención tanto en Panamá como en la comunidad internacional.