La decisión del presidente de pronunciar un discurso en horario de máxima audiencia desde el Oval demuestra lo cerca que estuvo el país de un colapso económico, que se evitó pocos días antes de que la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, dijera que Estados Unidos se quedaría sin efectivo para pagar las cuentas por primera vez. en la historia de la nación.
Biden dijo que firmaría el acuerdo presupuestario bipartidista el sábado, dos días antes de la fecha límite del lunes 5 de junio. El proyecto de ley fue aprobado por el Senado el jueves por la noche después de recibir 314 votos en la Cámara el miércoles.
Durante un discurso de aproximadamente 10 minutos con una transmisión de fotos familiares como telón de fondo, Biden explicó a los estadounidenses lo que significaría un incumplimiento para Estados Unidos, ya que culpó a los «rumores extremos», dijo, que llevaron a la nación al borde del abismo.
“Nadie obtuvo todo lo que quería, pero el pueblo estadounidense obtuvo lo que necesitaba. Evitamos una crisis económica y un colapso económico”, dijo Biden.
Los comentarios de Biden culminan semanas de tensas negociaciones entre la Casa Blanca y el presidente de la Cámara. Kevin McCarthy y los mejores republicanos. El ir y venir de morderse las uñas ha dejado al país y al mundo al borde de la llamada Fecha X, cuando los economistas predijeron que ocurriría una agitación global si no se llegaba a un acuerdo, que se acerca rápidamente.
El acuerdo Biden-McCarthy marcó una victoria para el presidente cinco meses después de un gobierno dividido, un momento en el que no estaba claro si la Casa Blanca podría encontrar puntos en común con los republicanos de la Cámara.
El viernes, Biden elogió a los líderes republicanos por sus negociaciones de «buena fe» durante la semana pasada.
“Quiero felicitar al presidente McCarthy. Él y yo, y nuestros equipos, hemos podido llevarnos bien, hacer las cosas. Fuimos directos el uno con el otro, completamente honestos el uno con el otro, respetuosos el uno con el otro. Ambas partes actuaron de buena fe. Ambas partes han cumplido su palabra”, dijo Biden, agradeciendo al líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries, al líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, y al líder de la minoría del Senado, Mitch McConnell.
“La votación final en ambas cámaras fue abrumadora, mucho más bipartidista de lo que se creía posible”, agregó.
Aunque Biden no promocionó la legislación como una victoria demócrata el viernes, su equipo planea usar el acuerdo para su propio beneficio político y retratar al presidente como una figura regular en desacuerdo con las alas más extremas del Partido Republicano, informó POLITICO. semana. La idea es que los votantes recompensen al presidente por trabajar de manera bipartidista, y el presidente se inclinó hacia ese mensaje el viernes, diciéndoles a los estadounidenses que el compromiso es vital para mantener la democracia.
A pesar del éxito del proyecto de ley en el Congreso, algunos progresistas y otros demócratas siguen frustrados con la decisión del presidente de negociar alrededor del techo de la deuda. Otros continuaron expresando su preocupación por los nuevos requisitos laborales para algunos beneficiarios de asistencia alimentaria y la aprobación de Biden de la construcción del oleoducto Mountain Valley que transportaría gas natural a través de Virginia Occidental y Virginia.
El viernes por la noche, Biden defendió las prioridades que dijo que la Casa Blanca «protegía». Se refirió a su intercambio con los republicanos durante su discurso sobre el Estado de la Unión en febrero, cuando preguntó a los republicanos si estarían de acuerdo en no recortar el Seguro Social y la atención médica, y acusó al Partido Republicano de lagunas fiscales para intereses especiales.
“Estamos recortando gastos y reduciendo déficits al mismo tiempo. Además, hemos protegido prioridades importantes desde el Seguro Social hasta Medicare, Medicaid, Veteranos, nuestras inversiones transformadoras en infraestructura y energía limpia”, dijo el presidente.
Biden no abordó el viernes una pregunta persistente sobre el futuro de las batallas por el techo de la deuda. A medida que la legislación eleva el techo de la deuda hasta el 1 de enero de 2025, el presidente ha dicho varias veces en las últimas semanas que espera evitar un escenario de fecha X en el futuro. Dijo que planea investigar el tema de la invalidación del techo de la deuda «meses más adelante».
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